Las patas de un perro son una de las partes más estresadas y vulnerables de su cuerpo. No solo soportan todo el peso del animal, sino que también sirven como amortiguadores, proporcionan tracción y protegen contra factores externos como el calor, el frío, las superficies irregulares y diversos contaminantes.

Cuando un perro corre, salta o simplemente camina, sus patas están expuestas a todo tipo de condiciones: desde el asfalto áspero y caliente en verano hasta el hielo y los productos químicos en invierno.

Aunque las almohadillas de las patas son naturalmente fuertes y resistentes, sin el cuidado adecuado pueden lesionarse, agrietarse o inflamarse, lo que provoca dolor, molestias e incluso cambios en la forma de andar del perro.

En este artículo, veremos algunos consejos útiles sobre cómo cuidar eficazmente las patas de su perro para garantizar una comodidad duradera y una buena salud.

 

1. Revise las patas regularmente

 

Las revisiones regulares de las patas son el primer y más importante paso para cuidarlas. Incluso si tu perro luce sano y no muestra signos de dolor, muchos problemas pueden pasar desapercibidos si no le prestas suficiente atención.

 

¿Cómo realizar la revisión?

Se recomienda revisar las patas de su perro al menos una vez al día, especialmente después de un paseo.

 

  1. Elija un lugar y un momento tranquilos donde el perro esté relajado.
  2. Levante con cuidado cada pata y examínela por todos lados.
  3. Separe suavemente los dedos y revise entre ellos.
  4. Toque las almohadillas y las uñas para asegurarse de que no haya zonas sensibles ni dolorosas.

 

¿Cómo realizar la comprobación?

 

¿A qué prestar atención?

 

  1. Cortes y lesiones - las heridas pequeñas pueden ser causadas por objetos afilados como vidrio, piedras o espinas;
  2. Objetos extraños - piedras, espinas, palos y otros residuos a menudo se atascan entre los dedos o en las almohadillas;
  3. Enrojecimiento e inflamación - si nota hinchazón o enrojecimiento, esto puede ser un signo de infección, una reacción alérgica o irritación por factores externos como la sal, productos químicos o plantas;
  4. Almohadillas agrietadas - la sequedad excesiva puede provocar grietas que causan dolor y molestias;
  5. Cambios en la marcha - si su perro cojea o evita pisar una pata en particular, esto puede ser un signo de dolor o molestias;
  6. Lamido o mordedura excesiva de las patas - esto puede deberse a una alergia, un problema de piel, una lesión o incluso estrés. Si su perro se muerde las patas constantemente, debe averiguar la causa lo antes posible.

 

¿Qué hacer si detecta un problema?

Si observa un objeto extraño, retírelo con cuidado con unas pinzas. Los cortes pequeños pueden limpiarse con una solución antiséptica y desinfectarse.

Si observa hinchazón, enrojecimiento intenso o sangrado, lo mejor es consultar a un veterinario para evitar complicaciones más graves.

 

Revisar las patas de su perro con regularidad solo toma unos minutos, pero puede prevenir muchos problemas y garantizar la comodidad y la salud de su amigo de cuatro patas.

 

2. Mantenga las patas limpias

 

Mantener las patas de tu perro sanas y cómodas requiere limpieza, aseo, corte de uñas e hidratación regulares. Estos hábitos no solo mejoran la higiene, sino que también previenen infecciones, lesiones y molestias.

 

1. Recortar el pelo entre los cojines.

 

Si tu perro tiene el pelo largo, puede acumular suciedad, humedad e incluso enredos, lo que le causa incomodidad y aumenta el riesgo de infecciones.

 

  • Recorta el pelo entre las almohadillas con tijeras de seguridad o cortaúñas.
  • No lo cortes demasiado corto para evitar dañar la piel.
  • Revisa si hay nudos o enredos que puedan restringir el movimiento.

 

2. Recorte de uñas

 

Las uñas largas pueden causar dolor, mala postura y dificultad para moverse.

El corte de uñas debe realizarse con regularidad para evitar estos problemas.

 

  • Use un cortaúñas especial para perros.
  • Tenga cuidado de no cortar la parte viva de la uña (donde se encuentran los vasos sanguíneos).
  • Si el perro está inquieto, corte las uñas gradualmente, poco a poco.
  • Si es necesario, use una lima para suavizar los bordes.

 

Recorte de uñas

 

3. Limpieza de las patas después de un paseo

 

Las patas de un perro acumulan mucha suciedad, químicos, polvo y bacterias.

Limpiarlas después de un paseo reduce el riesgo de irritación e infección.

 

  • Usa un paño húmedo o enjuaga las patas con agua tibia.
  • En invierno, retira la sal y los químicos de la nieve para evitar la irritación.
  • En verano, refresca las patas después de caminar sobre superficies calientes.
  • Si las patas están muy sucias, puedes usar un champú especial para perros.

 

4. Hidrata las almohadillas

 

Las almohadillas de las patas secas y agrietadas pueden causar dolor y molestias.

Hidratarlas las mantiene sanas y previene que se agrieten.

 

  • Usa aceites naturales como el de coco o el de oliva.
  • Puedes aplicar bálsamos especiales para patas que proporcionan hidratación y protección.
  • Aplica una crema hidratante después de pasear y antes de dormir, cuando el perro no vaya a caminar sobre superficies sucias.

 

3. Elija la protección adecuada para la temporada y el terreno.

 

Las patas de un perro están expuestas a diversas influencias atmosféricas y ambientales que pueden causar molestias, lesiones e incluso problemas de salud. Una protección adecuada según la estación y el terreno es fundamental para la comodidad y seguridad de su perro.

 

Protección durante los meses de calor

En verano, el asfalto, la arena y otras superficies pueden alcanzar temperaturas peligrosas que queman las patas de los perros.

 

  1. Comprueba la temperatura de la superficie con la mano o el pie descalzo. Si hace demasiado calor para ti, también lo hace para tu perro.
  2. Evita pasear al mediodía; pasea a tu perro temprano por la mañana o tarde por la noche, cuando las superficies están más frescas.
  3. Usa cremas y bálsamos protectores que creen una capa protectora y reduzcan el riesgo de quemaduras y grietas.
  4. Evita las superficies calientes y elige rutas con más vegetación.

 

Protección en invierno

El frío, la nieve y los productos químicos para descongelar pueden causar grietas, irritación e incluso congelación en las patas de tu perro.

 

  1. Evita los paseos en climas fríos; si las temperaturas son demasiado bajas, limita el tiempo que pasas al aire libre.
  2. Limpia las patas después de los paseos: la sal y los productos químicos de la calle pueden irritar la piel y causar reacciones alérgicas.
  3. Enjuaga las patas con agua tibia y sécalas bien. Utilice una crema protectora o vaselina que creará una barrera contra la humedad, el frío y los productos químicos.
  4. Si su perro pasa mucho tiempo al aire libre en invierno, los zapatos pueden ser una buena protección contra las heladas y los productos químicos.

 

Protección invernal

 

Protección al caminar por terrenos irregulares

Las rutas de montaña, los caminos de grava y las rocas afiladas pueden lesionar las patas de un perro.

 

  1. Revise la ruta con antelación.
  2. Entrene las patas para terrenos irregulares: aumente el tiempo que pase caminando sobre superficies más duras para que las almohadillas sean más resistentes.
  3. Use cremas y bálsamos protectores que eviten las grietas y reduzcan el riesgo de lesiones.
  4. Vigile si hay lesiones después de un paseo: si su perro cojea o se lame las patas, revise si tiene cortes o irritación.

 

Protección contra alérgenos e irritantes

Algunos perros pueden desarrollar alergias a la hierba, el polen, los productos químicos e incluso a ciertas superficies.

 

  1. Limpie las patas después de cada paseo para ayudar a eliminar posibles alérgenos.
  2. Preste atención a la picazón, el enrojecimiento y el lamido excesivo: si el perro reacciona fuertemente a ciertas superficies, consulte a un veterinario.
  3. Use aerosoles o cremas antialérgicas que pueden reducir la irritación y prevenir las molestias.

 

4. Estirar y masajear las patas.

 

Masajear y estirar las patas de tu perro son prácticas beneficiosas que mejoran la circulación, alivian la tensión y mantienen la movilidad de las extremidades. Estas técnicas pueden ser especialmente útiles para perros activos, perros mayores y razas propensas a problemas articulares.

 

Beneficios de los masajes en las patas

 

Un masaje no es solo una sensación placentera para el perro, sino que también ofrece numerosos beneficios fisiológicos y psicológicos:

 

  1. Mejora la circulación sanguínea - masajear las patas estimula el flujo sanguíneo, lo que ayuda a transportar oxígeno y nutrientes a los tejidos.
  2. Alivia la tensión y el dolor - si su perro pasa mucho tiempo en movimiento o tiene problemas articulares, el masaje puede ayudar a relajar los músculos.
  3. Reduce el riesgo de lesiones - el masaje mantiene la flexibilidad y la fuerza de los músculos y las articulaciones, lo que reduce la probabilidad de distensiones y otras lesiones.
  4. Fortalece el vínculo entre el perro y su dueño - al dedicarle tiempo al masaje, el perro se acostumbra a su tacto y se siente más relajado.

 

¿Cómo hacer un masaje en la pata?

Para que un masaje sea efectivo, debe realizarse con cuidado y con la presión adecuada.

Sigue estos pasos:

 

  1. Elige un lugar tranquilo donde tu perro se sienta cómodo. El masaje es más efectivo cuando tu perro está relajado.
  2. Comienza con movimientos suaves por toda la pata para preparar a tu perro y reducir la tensión.
  3. Masajea las almohadillas con las yemas de los dedos, realizando pequeños movimientos circulares en cada una.
  4. Frota los dedos y el espacio entre ellos.
  5. Coloca la mano sobre la pata y presiona suavemente para sentir la tensión muscular. Si tu perro reacciona con molestias, sé más delicado.
  6. Las patas están conectadas con articulaciones que también necesitan cuidado. Frota suavemente la zona alrededor de la muñeca para estimular la flexibilidad.
  7. Finaliza el masaje con unos movimientos suaves en la pata para calmar a tu perro.

 

¿Cómo hacer un masaje de patas?

 

Beneficios de estirar las patas

 

El estiramiento es fundamental para mantener la movilidad y prevenir lesiones. Es especialmente beneficioso para perros atléticos y mayores.

 

¿Cómo estirar las patas de un perro?

 

  1. Sujete suavemente la pata del perro y tire de ella ligeramente hacia adelante sin causarle dolor. Mantenga la posición durante unos segundos y repita varias veces.
  2. Levante la pata trasera hacia atrás, con cuidado de no torcerla. Esto ayudará a estirar los músculos de las caderas y la pelvis.
  3. Separe suavemente los dedos de la pata para mejorar la flexibilidad y prevenir calambres.

 

¿Con qué frecuencia se deben realizar masajes y estiramientos?

 

La frecuencia de masajes y estiramientos depende de la actividad y la edad del perro:

 

  1. Perros activos - se recomienda masajear después de largos paseos, carreras o entrenamientos;
  2. Perros adultos - 2-3 veces por semana para mantener la flexibilidad y aliviar el dolor articular;
  3. Perros con problemas ortopédicos - según lo recomiende el veterinario, aunque generalmente se recomienda masajear regularmente para aliviar el dolor.

 

5. Realice chequeos veterinarios regulares

 

Aunque cuides bien las patas de tu perro en casa, las revisiones veterinarias regulares son esenciales para la prevención. Un especialista puede detectar problemas ocultos, diagnosticar enfermedades en una etapa temprana y recomendar cuidados personalizados adaptados a las necesidades específicas de tu perro.

 

1. ¿Por qué son importantes los chequeos veterinarios regulares?

 

Las revisiones regulares ayudan a:

 

  • Detectar infecciones ocultas - a veces, un perro puede tener una infección fúngica o bacteriana invisible para el dueño;
  • Diagnosticar enfermedades autoinmunes o cutáneas - algunas afecciones como la pododermatitis (inflamación de la piel de las patas) pueden ser crónicas y requerir un tratamiento especial;
  • Comprobar parásitos - las garrapatas, pulgas o ácaros suelen esconderse entre los dedos, causando picazón e irritación;
  • Evaluar la marcha y las articulaciones - los cambios en la marcha pueden ser señal de problemas ortopédicos como artritis o displasia, que también afectan a las patas;
  • Aconsejar cuidados especializados - si su perro presenta problemas específicos, su veterinario podría recomendarle bálsamos medicinales, suplementos especiales o cambios en la dieta.

 

¿Por qué son importantes los chequeos veterinarios regulares?

 

2. ¿Con qué frecuencia debes llevar a tu perro a un chequeo?

 

La frecuencia de las revisiones depende de la edad, la raza y el estado de salud del perro:

 

  • Perros adultos sanos - revisión preventiva anual que incluye la revisión de patas, uñas y piel;
  • Cachorros y perros jóvenes - visitas veterinarias cada 3-6 meses, ya que sus patas son más vulnerables durante el crecimiento;
  • Perros mayores o razas propensas a problemas articulares - cada 6 meses, ya que las patas pueden verse afectadas por artritis y otras enfermedades degenerativas;
  • Perros con problemas previos en las patas - revisiones más frecuentes según sea necesario, según las recomendaciones del veterinario.

 

3. ¿Cómo se realiza la revisión de las patas en el veterinario?

 

Durante una revisión de rutina, su veterinario realizará varias pruebas importantes para evaluar el estado de las patas de su perro:

 

  • Inspección y palpación - se revisa el estado de las almohadillas, la piel interdigital, las uñas y la estructura general de la pata;
  • Prueba de sensibilidad y dolor - el veterinario puede presionar suavemente en diferentes puntos de la pata para determinar si el perro siente dolor;
  • Muestras de infección - si se sospecha una infección bacteriana o fúngica, se toma una muestra para su examen microscópico;
  • Evaluación de la marcha - si el perro tiene problemas en las patas, el veterinario puede observar su movimiento para identificar anomalías;
  • Recomendaciones de cuidado y tratamiento - según el estado de las patas, se pueden recetar ungüentos, medicamentos o suplementos dietéticos.

 

6. Conclusión

 

Cuidar las patas de tu perro es esencial para su salud y bienestar general. Las revisiones regulares, una buena higiene, la protección en diversas condiciones y los masajes ayudan a prevenir lesiones e irritaciones.

Cuando se requiere atención especializada, las revisiones veterinarias son clave para la detección temprana de problemas. Con un cuidado y atención constantes, puedes asegurarte de que tu perro tenga patas sanas y fuertes durante toda su vida.

 

FUENTES:

1. Skyline Animal Clinic: Tips To Help Your Dog's Paws Stay Healthy (25.04.25)
2. WebMD: Care Tips for Your Dog’s Paws  (25.04.25)